Lisa Simpson, lesbiana

Qué me gustan a mí los episodios de Los Simpson en los que se hacen un flashbacks o un flashforward, amiguitos. (Por cierto, ¿os acordáis de Flashforward? Lo que prometía y el mojón que acabó siendo, ¿eh?) Matt Groening, que conoce a la perfección mis gustos y se preocupa horrores de satisfacerlos, ha tenido a bien en regalarnos un episodio de esos en los que saltan varios años adelante en el tiempo. Concretamente, hasta el momento en el que Lisa Simpson sale del armario.

En este episodio, que se llama Holidays of the future passed, se reúnen Maggie, Lisa y Bart para rememorar sus vidas so far. Dentro de este flashforward encontraremos varios flashbacks, siendo el primero de ellos el que nos lleva a cuando Lisa, en la universidad, rememora sus experiencias lésbicas con una e incluso con dos mujeres a la vez (¡eso es ser un hacha, pequeña!) hasta terminar infelizmente casada con Milhouse, su eterno pretendiente.

En esta reunión de hermanos se nos pintará a Bart como un padre divorciado con dos aplicados hijos (vivir para ver) o a Maggie como una consagrada estrella del rock. ¿Y a santo de qué todo esto? Pues todo apunta a que responde a las típicas experiencias homosexuales que los americanos dicen tener en la universidad.

Lo cierto es que no es la primera vez que el tema gay/lésbico sale en Los Simpson: recordemos si no cuando el bar de Moe se convirtió en un local de ambiente, cuando Homer temía que Bart fuese gay tras conocer al dueño de aquella tienda vintage tan cuca o cuando Patty anunció que era lesbiana ante su perpleja hermana Marge. Sin olvidarnos, claro, de las tendencias homosexuales que dicen que manifiesta Milhouse Van Houten desde niño o del entrañable Smithers, cuyo amor reverencial por el señor Burns o por las Stacy Malibú le delatan.

¿Qué os parecería que el futuro de Lisa Simpson fuese descubrir que es lesbiana y que fue un error casarse con Milhouse? ¿Alguno de vosotros lo habría pensado alguna vez? Yo, sinceramente, no. Pero personalmente me alegro de que estos temas tengan su pequeño espacio en una serie como Los Simpson que, sin ser una serie con la etiqueta gay (léase Glee, por ejemplo, donde absolutamente todo es mega gay), sí que cuenta con muchas tramas gay-friendly que ayudan a que cabestros con dos neuronas entiendan como lo que es (algo normal) aquello que durante años se ha demonizado... y se sigue demonizando; todo ello a través del humor.

Y perdonad si el post me ha salido reivindicativo, pero a veces a uno se le levanta el puño así, como sin querer.