2012


Dicen que 2012 será peor que 2011. Y así, con este zurriagazo en plena frente, aprovecho para despedirme de vosotros hasta el 10 enero porque, sí señores, este menda empieza vacaciones esta misma tarde a partir de las siete de la ídem.

La verdad es que este 2011 ha sido de todo menos tranquilo. A nivel global, nuestros bolsillos han temblado, nuestros empleos han caído o se han visto seriamente perjudicados, nuestros créditos se han vuelto más asfixiantes, nuestras ilusiones mermadas y nuestra nevera cada vez más vacía porque endevé lo caro que está todo, oiga.

¿Pero qué cojones pasa con Gran Hermano?


Esto, amiguitos, es un dislate. Como podéis comprobar, hoy no hay uno sino dos posts, fruto en este último caso de la indignación que ha aflorado en mis entretelas al leer el último post del blog de Mercedes Milá (sí, el famoso bolo sigue funcionando, cosas de Merceditas). En él, la casi eterna presentadora de Gran Hermano nos deja un par de párrafos bastante crípticos al respecto de GH12+1, especialmente después de haber ya visto varias promos de la nueva edición y de que ahora es el mejor momento de que empiece a emitirse, una vez terminado Acorralados:

En el último post os anuncié algo que debía haber ocurrido hoy. Sé que algunos de vosotros andáis extrañados y yo estaría igual en vuestro lugar. Hubo cambios y no pude avisaros como merecéis. Lo que os dije o, mejor dicho, os insinué, sigue estando en pie pero se retrasa unos días. No perdáis la esperanza, todo se andará.
(…)
Los planes han cambiado pero la esencia no. Los que alguna vez deseasteis entrar en nuestra casa de Guadalix de la Sierra estad muy atentos a los pasos que yo vaya dando…todo llegará. Abrazos de días de Navidad para todos.

La vuelta de Adrià Collado a 'La que se avecina'


Foto: Vertele

Pocas cosas en esta densa y pegajosa semana navideña me alegran más que noticias sobre una de mis series favoritas. Y es que después de haber estado dos días agonizando por culpa de unas putas ostras que me dio por comer y que me han tenido casi abrazado a la taza del váter hoy, ya recompuesto, he dado palmas imaginarias al ver que teníamos (más) noticias de la nueva temporada de La que se avecina.

Resulta que ya sabemos en qué contexto vuelve Adrià Collado a la serie; hagamos memoria. Sergio Arias, actor de culebrones, se fue de Mirador de Montepinar abrumado por la carga de tener que hacer frente a un hijo, el que tuvo con Maite en uno de sus fogosos encuentros sexuales… exacto, Ojos de Pollo. El caso es que ahora, al otrora doctor Ventura ha dejado de tocarle la varita mágica de la suerte profesional y ahora está más arruinado que Teresa Berengueras tras pagar el recibo del gas y, quizás a consecuencia de ello, decide volver a Mirador de Montepinar a responsabilizarse de Ojos de Pollo (que ya son ganas).

¡Feliz Navidad!


Readaptando ‘La Noria’


Qué cosas tan curiosas pasan en Mediaset. Yo es que siempre tengo la sensación de que llevan media vida intentando aparentar que son una empresa seria, que toma decisiones meditadas tras valorar todas sus consecuencias y al final resulta que no pueden evitar quedar ante el respetable como un gallinero o, si lo preferís, como una casa de putas.

Voy a explicarme, que hoy tengo el día locuaz. Cuando estalló ese montón de mierda llamado ‘entrevista a la madre del Cuco en La Noria’ en los santos morros de Paolo Vasile, la maquinaria telecinquera se puso en marcha: que si autopromos de apoyo a los anunciantes y a la cadena, declaraciones confusas y difusas al respecto de la fuga de anunciantes, negaciones rotundas de que la cadena fuese a cancelar el programa… Pero a la vista está que La Noria, tal y como nos tenía acostumbrados, era insostenible: las pérdidas monetarias se contaban por centenas de miles de euros semanales y eso, pues como que no.

Pastora Soler, representante de España en Eurovisión 2012


foto: jenesaispop.com

Qué mañana que hemos pasado todos, amiguitos, eurofanes y no eurofanes. Unos, viendo una vez tras otra el tráiler de la esperada primera película de El hobbit (yo entre ellos); otros, pendientes de saber quiénes serán los próximos ministros del gobierno de Rajoy cuando Mari Ano tenga a bien darlos a conocer; y los que molamos (la mayoría), anonadados ante la noticia, a las diez de la mañana, de que TVE anunciaría su representante a Eurovisión en el plazo de dos horas.

Es decir, que de no saber si España participaría o no en Eurovisión 2012 (tal y como servidor deustedes escribió hace unos diítas en este blog tan cuco) hemos pasado a saber que sí que vamos y con qué representante: Pastora Soler. Sí, amigos, esa pizpireta andaluza artífice de tonadillas como Corazón congelado, Moliendo café o La mala costumbre será la encargada de ir a Bakú (seguro que hasta antes de ayer pensaba que Bakú era un tipo de estantería del Ikea) a representarnos ante lo que viene siendo Europa a pesar de que hace sólo un par de meses dijese que participar en Eurovisión no entraba dentro de sus planes.

Lisa Simpson, lesbiana


Qué me gustan a mí los episodios de Los Simpson en los que se hacen un flashbacks o un flashforward, amiguitos. (Por cierto, ¿os acordáis de Flashforward? Lo que prometía y el mojón que acabó siendo, ¿eh?) Matt Groening, que conoce a la perfección mis gustos y se preocupa horrores de satisfacerlos, ha tenido a bien en regalarnos un episodio de esos en los que saltan varios años adelante en el tiempo. Concretamente, hasta el momento en el que Lisa Simpson sale del armario.

En este episodio, que se llama Holidays of the future passed, se reúnen Maggie, Lisa y Bart para rememorar sus vidas so far. Dentro de este flashforward encontraremos varios flashbacks, siendo el primero de ellos el que nos lleva a cuando Lisa, en la universidad, rememora sus experiencias lésbicas con una e incluso con dos mujeres a la vez (¡eso es ser un hacha, pequeña!) hasta terminar infelizmente casada con Milhouse, su eterno pretendiente.

¿Peligra la participación de España en Eurovisión 2012?


Queridos eurofanes (y eurofanas): todavía no sabemos oficialmente si España participará o no en Eurovisión 2012. Sí, y eso es motivo de drama. ¿Por qué? Pues porque en enero termina el plazo para que las televisiones europeas comuniquen si participan o no en el festival de Eurovisión de ese año, así como en marzo termina el plazo para presentar canción e intérprete.

Pero que no cunda el pánico, porque se descarta totalmente la ausencia de España en Eurovisión 2012… o al menos eso dicen en Vertele: “Iremos a Eurovisión, pero aún no sabemos ni cómo ni con qué cantante”. Y es que si no participásemos en el festival sería la primera vez en cincuenta años que rompemos esa bonita tradición de ir a hacer el ridículo cantar nuestras alegres tonadillas en Europa.

Globos de Oro 2012: se nota que no hay ‘Mad Men’


No, este año no ha habido temporada de nueva de Mad Men, una de mis ciento ochenta y siete series favoritas all-time, y es por eso por lo que no está nominada a los Globos de Oro. Pero no hay mal que por bien no venga, y ese es que al fin hay un poquico de emoción en la batalla que siempre ganan Mad Men y Modern Family. Porque, seamos sinceros, Mad Men es tan perfecta que da hasta un poco de rabia.

Pero vamos a lo que vamos, porque ya se han hecho oficiales las nominaciones a los Globos de Oro, y aunque servidor es amante de todo lo que sea choubisnes en general, sólo voy a comentar lo referente a la tele (que pa algo esto es Teuvemix, ¿no?). Como mejor drama compiten American Horror Story (de la que me han hablado maravillas), Mad Men, Boardwalk Empire, Boss, Juego de tronos y Homeland. Yo, que soy altamente friki de la saga de George R. R. Martin nivel ‘sólo me falta hablar dothraki’, estoy encantadérrimo con esta nominación.

En la categoría de mejor comedia están, por supuesto, Modern Family y Glee. Les acompañan New Girl, Enlightened y Episodes. Conozco gente indignada por la no nominación de Pretty Little Liars, pero vamos… que está bastante claro que volverá a ganar Modern Family. Sorprende que hayan nominado a Downton Abbey en la categoría de mejor miniserie o telemovie (?) y que del gran elenco de actores de Juego de tronos sólo hayan nominado al por otra parte genial Peter Kinklage (Tyrion Lannister).

¡Vivan los novios!


“¿Quién se nos casa?”, os preguntaréis vosotros, oh amados y nunca lo suficientemente bien considerados amigos lectores. Pues ni más ni menos que laSexta y Antena 3 que, tras muuuuuchos meses de tocar los cojones negociar las condiciones, parece ser que al fin han llegado a un acuerdo para hacerse un Telecinco-Cuatro; o lo que es lo mismo, fusionarse.

¿Qué significa esto? Pues que ahora a Mediaset le va a salir un competidor a su misma altura, ya que el conglomerado resultante de la fusión de estas dos cadenas tiene, ahora mismo, más presencia e importancia que la suma entre Telecinco, Cuatro, FDF, La 7 y el resto de canales que les van a la zaga.

Apadrina a un miembro de la Casa de Alba


Estaba yo ayer por la noche en mi casa tan ricamente cuando caí en que era domingo. Domingo. Ese día en el que te esfuerzas en paladear lo poco que queda de fin de semana y evitas pensar en la universidad, el colegio, los estudios, el trabajo… o la falta de él. Desde siempre las noches de los domingos han sido mis favoritas para ver la tele, pero la cosa me ha ido de mal en peor desde que todas las cadenas han decidido concentrar todo lo altamente molante para la noche del día en el que Intereconomía emite misa desde el Valle de los Caídos (os juro que es verdad).

Últimamente me he hecho bastante adicto a Salvados y a la inteligencia con la que cuentan las cosas que pasan en este país y fuera de él. Jordi Évole ha hecho que no haya visto casi esta cuarta edición de Pekín Express (aunque el pretendido buenrollismo de Jesús Vázquez ha tenido mucho que ver en mi abandono prematuro del programa) y me ha hecho lanzar vítores y hurras desde el sofá de mi casa, además de algún que otro tuit de indignación que suelto así como de vez en cuando.

Talent shows: lo estamos dando, lo estamos regalando


Id agarrándoos los machos, porque a partir de ahora va a parecer que en España todo el mundo tiene un talento oculto para algo, especialmente para cantar. Y es que, si mi memoria y capacidad deductiva no me fallan (que es muy probable que pueda pasar), en los próximos meses aterrizarán en nuestras teles no uno ni dos, sino tres talent shows de canto. Tres.

Del que se lleva más tiempo cacareando es The Voice, el formato del que ya hablé hace unos diítas y cuyo mayor aliciente es que cantantes consagrados (pero consagrados de verdad, no consagrados en plan ‘vendí mucho en los noventa y ahora a lo máximo que aspiro es a cantar ante un puñado de viejas artríticas en Benidorm') valoran a una serie de aspirantes a cantantes sin verles, sólo oyéndoles.

Miedo: GH volverá a sus orígenes


Y digo miedo porque la última vez que un reality volvió “a sus orígenes” fue cancelado de manera prematura (léase OT 2011). Teóricamente faltan sólo unas pocas semanas para que arranque la edición número 13 de Gran Hermano (la 12+1, tal y como la supersticiosa de Mercedes Milá se empeñará en decir) y Telecinco ha decidido que ‘Dale la vuelta’ sea el lema de este Gran Hermano.

De hecho, lo de que esto sea el lema de GH12+1 es una cosa que nos hemos sacado de la manga alegremente los que hablamos de televisión, ya que Telecinco simplemente se ha limitado a hacer un vídeo con gente yendo boca abajo por la vida bajo el lema de marras escrito en –oh casualidad– la misma tipografía que el logo de Gran Hermano.

Estar de baja es más llevadero con ‘True blood’


*Atención: esta entrada contiene spoilers sobre la cuarta temporada de 'True blood'. Si no la has visto y no quieres que te revele cosas de la trama, casi mejor que te esperes al post del lunes (de buen rollo, ¿eh?)*

Ya he vuelto. Por si alguien no me sigue en Twitter o no es mi súperamigo en Facebook, he estado de baja estas últimas dos semanas. Nada grave (si no ahora estaría agonizando en una cuneta o algo por el estilo y por suerte no es el caso) pero he estado diez días metido en mi santa casa. Y si hay algo por lo que se caracteriza estar en casa de baja es porque te pasas el día delante de la tele en estado precomatoso.

Y para sobrellevarlo, me enchufé True blood. En vena. Hace cosa de un par de meses empecé a ver la tercera temporada de mi serie favorita de las que actualmente se emiten, pero por falta de tiempo lo dejé en el capítulo seis. ¿Resultado? Estos días me he zampado los capítulos restantes de la tercera y todos los de la cuarta. Eso son como dieciocho episodios a razón de hora por capítulo y confirmo que no he quedado demasiado tocado psicológicamente. Al menos no demasiado.

 
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