Antes que nada, perdonad la ausencia de post el viernes. Como os conté en algún que otro tuit de estos que me salen de vez en cuando, hubo reformas en la oficina y mi ordenador estuvo empaquetado desde las 9.30 de la mañana, momento a partir del cual me puse a transportar cajas, desmontar archivos, destruir documentos y desclasificar mierda varia junto a mis compañeros.
Hoy, ya con mobiliario nuevo y mi ordenador operativo (todo lo operativo que me permite el Oompa-loompa que pedalea dentro) vuelvo a la normalidad comentando la etapa de anoche de Pekín Express. Una etapa en la que, si bien tampoco pasó nada especialmente relevante, se adivinaron varios dramas que creo que acontecerán en las próximas etapas.
Aquí va a haber competición, amiguitos. No va a ser como hace un par de años con Fran y Merino o el año pasado con los azafatos monguers encantados de conocerse. Si la cosa sigue así, las zancadillas entre parejas pueden estar a la orden del día, cosa que no puede gustarme más.
Por otro lado, ya empieza a haber parejas que se llevan mal. Y como era previsible, los primeros en tener crisis han sido Jota y Freire. Las diferencias entre estos dos se están acusando a medida que van pasando las etapas y ayer tuvo lugar la primera bronca: Jota casi no sabe hablar inglés (iba a decir que sólo sabe hacer porno, pero está claro tras su vídeo sexuarl que pa vividor-follador no vale) y Freire se cree que sabe mucho inglés, vamos, que no se crió en Stratford-upon-Avon porque le daba pereza. La soberbia de Freire y su permanente actitud de reina del drama (recordemos ese ‘habla tú, que yo ya no tengo voz’) hicieron estallar a Jota, que le mandó a cagar a la vía por su continuo afán en menospreciarle.
Freire, indignado que lo flipas ante tamaña afrenta, se envalentonó y culpó a Jota de todos sus retrasos (en la carrera, se entiende), y el otro reaccionó diciéndole que si tan listo es, que lo haga él todo (o algo así). Total, que estos dos empiezan ya a no soportarse y durante el cebo del programa de la semana que viene vemos que la cosa va a ir a más.
Otras que creo yo que van a acabar hasta el pepe el una de la otra son Mar y Vanessa, las hermanas sevillanas. Me da en la nariz que a estas les quedan dos o tres etapas de buen rollo y esplendor, porque a la que empiecen a estar cansadas y a llegar de las últimas a la meta seguro que llegan los dramas, los lloros, los tirones de pelos y lo que vienen siendo los catfights de toda la vida.
¿Seremos testigos de la primera ruptura de parejas en Pekín Express? ¿Habrá cambio de parejas el estilo del que había en Fama? Por el momento, la cosa está así: cuatro parejas empatadas a número de amuletos con la victoria de ayer de Chinto y Pablo y una pareja a la que le salió la tarjeta verde del sobre negro: Santiago y Javi (soy altamente fan de Santiago) llegaron últimos pero la suerte les salvó, aunque deberán llevar un handicap que les ralentizará la marcha. La semana que viene se juegan su paso a Tanzania, ¿qué pareja se quedará fuera? ¿Se romperá alguna pareja?
1 comentarios:
a mi me encantan las hermanas sevillanas, bueno lunny tbn se vio en el adelanto que a la cuqui jackson la rapaban entera, la que se vaa liar...
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